¿De dónde venimos? ¿Por dónde andamos? ¿Hacia dónde podríamos ir?


jueves, 17 de febrero de 2011

Pinceladas en el tiempo

"Sólo en los últimos doscientos años, a medida que otras instituciones económicas y políticas comenzaban a cumplir muchas de las funciones que alguna vez correspondieron al matrimonio, los europeos y norteamericanos empezaron a considerar el matrimonio como una relación personal y privada que debería satisfacer sus deseos emocionales y sexuales. Una vez esto ocurrió, la elección libre llegó a ser la norma social para seleccionar al compañero, el amor se convirtió en la razón principal para casarse y el éxito del matrimonio se midió por su capacidad de satisfacer las necesidades de sus miembros.

Pero cada uno de estos cambios tuvo tanto implicaciones negativas como positivas para la estabilidad del matrimonio entendido como institución. Tan pronto como se impuso el ideal de casarse por amor, sus defensores más entusiastas, empezaron a exigir el derecho a divorciarse en caso de que el amor muriera. Una vez que la gente se convenció de que las familias deberían dar cariño y protección a los hijos en vez de explotar su trabajo plantearon la inquietud de que las consecuencias legales de la ilegitimidad de los hijos eran inhumanas. Y cuando la gente llegó a considerar que la calidad de las relaciones era más importante que las funciones económicas de la institución, algunos hombres y mujeres argumentaron que el amor comprometido de dos personas no casadas, incluyendo las del mismo sexo, merecían al menos el mismo respeto social que un matrimonio formal celebrado por razones mercenarias."

Del libro HISTORIA DEL MATRIMONIO DE STEPHANIE COONTZ